El día jueves 21 de marzo se dio comienzo al año académico en el Centro de Estudios CONFERRE, y como formandos/as lo recibimos con una excelente noticia.
Chile fue sede de la XVLI Junta Directiva de la Confederación caribeña y latinoamericana de religiosos/as, en el marco de su 60° aniversario. Por este motivo, miembros del equipo de la CLAR nos compartieron las propuestas para el Trienio (2018-2021) .
Junto al ícono de las Bodas de Caná nos presentaron las seis claves de interpretación, como horizonte inspirador de la Vida Consagrada para América Latina y el Caribe, posteriormente se abrió la instancia para dialogar y compartir las resonancias que se suscitaron.
Durante la presentación de estas líneas pastorales, la asamblea en un hermoso diálogo con los integrantes de la CLAR, hizo hincapié en la urgencia que tenemos como vida consagrada, de volver a fijar nuestro centro en Jesucristo y en el servicio del prójimo. Haciendo eco del llamado de María, que nos invita en la profundidad de nuestros corazones: “Hagan todo lo que Él les diga“.
Nosotros/as, como vida religiosa joven, en proceso de formación, nos sentimos interpelados/as a ser agentes proféticos en nuestra sociedad, en nuestra Iglesia y por sobre todo en nuestras comunidades, preguntándonos a diario: ¿Con qué agua llenamos nuestras tinajas para que la Ruah la transforme en el mejor vino?
Estamos en el momento del cambio, esta es la hora de llenar nuestras vasijas y disponernos a la acción del Espíritu, para ser vino abundante como dice la canción inspiradora de este encuentro:
“Estamos aún de fiesta, ya es la hora
son tantos invitados, ya es la hora.
¡La fiesta no puede acabar!
¡La Ruah no se puede apagar!
Ivonne Arellano Sandoval, Postulante Carmelitas Misioneras
Juan Jara Parra, Postulante Orden de la Merced
Macarena Jorquera Arzola, Postulante Religiosas del Sagrado Corazón
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