Dios manifiesta su gloria. (Domingo de la Epifanía)
Evangelio según San Mateo 2, 1-12
En esta semana en que ha partido a la Casa del Padre el Pbro. Miguel Jordá Sureda, queremos meditar el sentido de la Epifanía del Señor con unos “versos a lo divino” que él tanto apreció y que difundió con perseverancia a lo largo de sus años en Chile. Misionero español, llegó a Chile en los años 60 y en esta tierra entregó su vida hasta el encuentro final con el Padre Dios, el 2 de enero de 2018. Como tantos misioneros, en nuestra tierra y a lo largo del mundo, su vida manifiesta el misterio de Dios que revela su gloria a todas las naciones, como en Belén a los magos venidos del Oriente.
Gloria al Señor que ha nacido
cantaron los celestiales
y con divinas señales
hasta el pesebre han venido.
El Niño está revestido
de la sonrisa más pura
gloria a Dios en las alturas
los ángeles corearon
y todos a una cantaron
tengan paz las criaturas.
En un pesebre botado
fue donde nació el Mesías
por cumplir la profecía
que Dios había anunciado.
Sus padres con gran cuidado
con las pajas lo cubrieron
y tan pronto lo supieron
hombres sabios y leídos
a ver al recién nacido
desde la Arabia vinieron.
A aquel Divino tesoro
lo visitaron tres magos
trayéndole de regalo
el incienso, mirra y oro.
Aves cantaron en coro
en aquel feliz momento
el buey le echaba el aliento
a Jesús Hijo de Dios
y el gallo con dulce voz
anunciaba el nacimiento.
…
Herodes le hizo la guerra
al Mesías por doquier
sabiendo que iba a nacer
el Rey del cielo y la tierra.
Furioso como una fiera
ordenó como un demente
maten a los inocentes
con tal que muera Jesús
pero Dios con su virtud
lo libró de aquella muerte.
A Jesús lo ha perseguido
Herodes bárbaro y cruel
y escapó del pueblo aquel
hacia las tierras de Egipto.
Así quiso el Infinito
dar a todos a entender
que por practicar el bien
se sufren persecuciones
perseguido por Herodes
fue el Rey de Jerusalén.
Por cuidar al Infinito
como en la historia se ve
María con San José
Padecieron lo inaudito.
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